El esmerilado de cristales

Los cristales con efecto esmerilado presentan una estética realmente muy interesante para aplicar en diferentes complementos decorativos en el hogar. La técnica consiste en pulir la superficie de los cristales con polvos abrasivos, hasta lograr que el vidrio tome una coloración opaca.

El esmerilado se utiliza como un interesante detalle decorativo en vidrios de puertas y ventanas, que adquieren un carácter opaco, y además provoca que resulte imposible distinguir los elementos a través de los cristales. Esta técnica puede realizarse en forma artesanal y hogareña, con algo de paciencia y voluntad y elementos como polvos de esmeril, agua y láminas de hojalata.

El esmeril es una clase de roca que al ser mezclada con otros minerales sirve para crear polvo abrasivo. Se logra una gran dureza, capaz de rayar cualquier tipo de cuerpo, con la única excepción del diamante. Es así que se lo emplea en el labrado de piedras preciosas, para otorgar brillo a metales, en el afilado de herramientas y para deslustrar cristales de todo tipo.

El proceso de esmerilado comienza fijando el cristal sobre una superficie, siendo ideal para ello las mesas de madera o las encimeras de mármol. Ya dispuesto el cristal, es necesario espolvorear toda la superficie con el esmeril. Posteriormente se aplica agua, hasta lograr la conformación de una pasta líquida.

A continuación se debe frotar el cristal con la lámina de hojalata, colocando la misma sobre la palma de la mano. Se deben realizar movimientos fuertes y circulares, repitiendo el proceso hasta lograr aclarar la superficie. Una vez concluido este trabajo, se requiere lavar el vidrio con jabón y aclararlo nuevamente con mucha agua. La tarea debe realizarse únicamente en una de las caras del cristal para lograr opacar el vidrio.